Androides: Estos artilugios se parecen y actúan como si fueran seres humanos.
Este tipo de robots no existen en la realidad, por lo menos por el momento, sino
que son elementos ficcionales.
Industriales: Los robots de este tipo pueden ser electrónicos o mecánicos y se los
utiliza para la realización de los procesos de manipulación o fabricación
automáticos. También se les llama robots industriales a aquellos
electrodomésticos que realizan simultáneamente distintas operaciones.
Médicos: Bajo esta categoría se incluyen básicamente las prótesis para
disminuidos físicos. Estas cuentan con sistemas de mando y se adaptan
fácilmente al cuerpo. Estos robots lo que hacen es suplantar a aquellos órganos o
extremidades, realizando sus funciones y movimientos. Además existen robots
médicos destinados a la realización de intervenciones quirúrgicas.
Teleoperadores: Estos robots son controlados de manera remota por un operador
humano. A estos artilugios se los utiliza en situaciones extremas como la
desactivación de una bomba o bien, para manipular residuos tóxicos.
Poliarticulados: Si bien estos pueden tener de diversas configuraciones, lo que
tienen en común estos robots es que son sedentarios. Estos son diseñados para
mover sus terminales con limitada libertad y de acuerdo a ciertos sistemas de
coordenadas. Estos robots son ideales para cuando se precisa abarcar una amplia
zona de trabajo.
Gabriela Villegas
QUÉ ES UN ROBOT?
Un robot es una entidad virtual o mecánica artificial. En la práctica, esto es por lo
general un sistema electro-mecánico que, por su apariencia o sus movimientos,
ofrece la sensación de tener un propósito propio.
La palabra robot puede referirse tanto a mecanismos físicos como a sistemas
virtuales de software, aunque suele aludirse a los segundos con el término
de bots.
No hay un consenso sobre qué máquinas pueden ser consideradas robots, pero sí
existe un acuerdo general entre los expertos y el público sobre que los robots
tienden a hacer parte o todo lo que sigue: moverse, hacer funcionar un brazo
mecánico, sentir y manipular su entorno y mostrar un comportamiento inteligente,
especialmente si ése comportamiento imita al de los humanos o a otros animales.
Aunque las historias sobre ayudantes y acompañantes artificiales, así como los
intentos de crearlos, tienen una larga historia, las máquinas totalmente autónomas
no aparecieron hasta el siglo XX. El primer robot programable y dirigido de forma
digital, el Unimate, fue instalado en 1961 para levantar piezas calientes de matel
de una máquina de tinte y colocarlas.
Gabriela Villegas
LA ROBÓTICA
DEFINICIÓN
La robótica es una ciencia o rama de la tecnología, que estudia el diseño y
construcción de máquinas capaces de desempeñar tareas realizadas por el ser
humano o que requieren del uso de inteligencia. Las ciencias y tecnologías de las
que deriva podrían ser: el álgebra, los autómatas programables, las máquinas de
estados, la mecánica o la informática.
HISTORIA
La historia de la robótica ha estado unida a la construcción de “artefactos”, que
trataban de materializar el deseo humano de crear seres semejantes a nosotros
que nos descargasen del trabajo. El ingeniero español Leonardo Torres Quevedo
(que construyó el primer mando a distancia para su torpedo automóvil mediante
telegrafía sin hilodrecista automático, el primer transbordador aéreo y otros
muchos ingenios) acuñó el término “automática” en relación con la teoría de la
automatización de tareas tradicionalmente asociadas a los humanos.
Karel Capek, un escritor checo, acuño en 1921 el término Robot en su obra
dramática “Rossum’s Universal Robots / R.U.R.”, a partir de la palabra checa
Robbota, que significa servidumbre o trabajo forzado. El término robótica es
acuñado por Isaac Asimov, definiendo a la ciencia que estudia a los robots.
Asimov creó también las Tres Leyes de la Robótica. En la ciencia ficción el
hombre ha imaginado a los robots visitando nuevos mundos, haciéndose con el
poder, o simplemente aliviándonos de las labores caseras.La Robótica ha
alcanzado un nivel de madurez bastante elevado en los últimos tiempos, y cuenta
con un correcto aparato teórico. Sin embargo, al intentar reproducir algunas tareas
que para los humanos son muy sencillas, como andar, correr o coger un objeto sin
romperlo, no se ha obtenido resultados satisfactorios, especialmente en el campo
de la robótica autónoma. Sin embargo se espera que el continuo aumento de la
potencia de los ordenadores y las investigaciones en inteligencia artificial, visión
artificial, la robótica autónoma y otras ciencias paralelas nos permitan acercarnos
un poco más cada vez a los milagros soñados por los primeros ingenieros y
también a los peligros que nos adelanta la ciencia ficción. Gabriela Villegas